domingo, 18 de noviembre de 2007


El aprendizaje de la mano con la familia.

En el artículo anterior cuando se hablaba del aprendizaje de las matemáticas se resaltaba el factor afectivo y emocional con el que se dispone la persona a la hora de aprender, ya sea éste de tipo consiente o inconsciente, por medio de sus experiencias.

Es así, que estos principios se llevan a todo aprendizaje de la vida, desde que estamos en el vientre materno donde recibimos los primeros estímulos asociados a emociones hasta el extenso desarrollo evolutivo que sufrimos durante las etapas de la vida. Una de estas etapas importante es cuando comenzamos la edad pre escolar y escolar que dan paso a la formación de un ser íntegro, por eso la calidad que otorga la familia en la formación de este ser, va a consistir en un agente contenedor emocional, afectivo y receptivo en el proceso de aprendizaje brindándole apoyo, protección, cuidado, motivación, estimulación entre muchos otros factores intrínsecos en la vida cotidiana de la familia actual.

Cuando nos referimos a la familia actual chilena, estamos frente a múltiples patrones formados y establecidos en el presente siglo, resaltando en las estadísticas recientes, la ascendente formación de hogares monoparentales. Éstos principalmente cuentan con una figura de sostén económico y afectivo-emocional; predominando la madre seguida por algunos índices de padres formadores de hogares monoparentales. Otro es el caso de los hogares de padres separados, donde el o los hijo(s) viven con un padre y con la otra figura paterna se ven cada un tiempo periódico (lo más prudente). En estos casos es imprescindible que la pareja formadora de la familia sea consiente de los dos conceptos incluidos: la pareja marital y la pareja parental; se sabe que la primera esta disuelta pero la segunda seguirá siendo función principal en la formación y evolución de sus hijos.

Los padres muchas veces no son consientes de este concepto y tienden a confundirse en las obligaciones (económicas, educativas formales, salud formal), contrarrestando o abandonando la acción emotiva de padres en conjunto hacia su(s) hijo(s). Muchos de los padres suponen que la relación de ellos muere al momento de la separación o divorcio, y es ahí donde esta el error ya que sus relaciones como padres no sucumbirán.

En el caso de los hogares con ambos padres presentes no se encuentran exentos de este enfoque tergiversado de la crianza, algunos patrones son: olvido y muerte de la pareja marital, presencia sólo de un padre parental o de la pareja marital.

Ciertamente este hacer en conjunto es la base para el apresto, apoyo y estimulación cognitivo – afectiva que precisa cada niño en su progreso, ofreciéndole de modo figurativo una cuna, andamio y trampolín en los procesos de aprendizajes cognitivos, psicológicos y afectivos que serán el esqueleto del ser formador vivo del mundo que se mueve en coordinaciones amorosas coordinadas.

Teorías del desarrollo, cultura y educación



Los paradigmas planteados por los diferentes enfoques del desarrollo cognitivo, sean del autor que sean, llevan consigo una mochila que no necesariamente se reconocen y aceptan al asumirlas como válidas. Esta mochila va cargada del momento histórico (los hombres se parecen más a su tiempo que a sus padres) en el cual fueron fecundadas, y el contexto social inmediato que sirvió de escenario para que la observación de determinados fenómenos, les dieran su estructura fundamental. Es evidente que estas características intrínsecas condicionan las expectativas que nos presentan, y al asumirlas como válidas, sin evaluar las condicionantes sociales y geográficas que las guían, se cae en la ceguera teórica, de construir sólo en base a las teorías propuestas, estratos de desarrollo aplicables a cada individuo, independiente del tiempo y el contexto que lo rodee. Esta súper valoración del papel teórico puede jugar un rol nocivo en las expectativas que se generan, cuando se aplican diferentes parámetros al evaluar el normal desarrollo de un niño y olvidamos lo que debe estar a la base de cualquier evaluación, que es, la cuestión de cómo se construye el desarrollo, y partiendo de esta condición básica, generar los parámetros que nos permitan evaluar el desarrollo normal de un niño. Es evidente que existe más de una condicionante que da forma a la particularidad cultural de nuestro desarrollo, condicionantes que van desde el escenario geográfico, hasta las casi nunca consideradas subjetividades ideológicas que condicionan la conducta de un determinado grupo frente a un mismo acontecimiento (1). No siempre es considerada, por ejemplo, el tipo de relación familiar que cada cultura considera como la apropiada, y a partir de esta relación hacer observación objetiva de los tiempos de “maduración” que cada integrante posee. Es evidente que más de una característica puede pasar por alto al no tomar en cuenta esta relación fundamental en el desarrollo psicosocial de un niño, y actuar manera tan violenta como lo es el rotular de manera externa, sin previos conocimientos del medio sobre el cual se está trabajando, o se pretende generar dinámicas educacionales que sean significativas a la hora de propiciar el desarrollo íntegro de una persona. Sobre esta reflexión quedan muchos más relaciones que se pueden hacer, como cuando tomamos las significativas definiciones que John Dewey hace sobre la experiencia en el ámbito de la educación, que no las evalúa desde el prisma, que por ese entonces, hacía la educación progresiva, que exigía que la experiencia fuera la que dirigiera la calidad de la educación, y, por lo tanto, la falta de ésta nos ponía frente a una educación deficiente, sino que, por el contrario, no era la falta de experiencia la que hacía deficiente la educación, sino la calidad de la experiencias, y que éstas debían siempre, para considerarse como educativas, como generadoras de nuevas experiencias, como experiencias que posibilitaran que un niño quisiera vivir nuevas experiencias de ese tipo, pero ¿se pueden alimentar esas expectativas si no conocemos lo que es o no significativo para un niño?. Es por eso que se aplauden esfuerzos como los realizados al estudiar, en pueblos del interior de Arica, el efecto que la altura tiene sobre el funcionamiento cerebral y como esto afecta en las diferentes funciones que dan forma a los procesos cognitivos, memoria, tiempos de concentración, etc. (2). No es sólo la realidad objetiva, como ya se ha mencionado, y su influencia sobre los procesos orgánicos los que reflejen las dinámicas sociales propias de las diferentes culturas, y parados sobre este risco construir los aportes que ayuden superar las vallas que tantas veces se han criticado de la educación nuestra de cada día. Pero mas allá de entender el ámbito de la educación como una isla exclusiva de los participantes directos, de lo que se puede reconocer como la estructura educativa formal, se debe entender como un campo amplio que requiere la participación seria de todos los estudiosos que puedan generar algún tipo información que nos permita dejar de dar palos de ciego o buscar recetas mágicas aplicadas en otras realidades, en las cuales no encontramos ninguna de las dinámicas que nos caracterizan y, por consiguiente, valorar los procesos que nos identifican para poder generar experiencias significativas dentro de la gama de posibilidades que valóricamente se consideren como positivas dentro del desarrollo íntegro de una persona.

(1) El ejemplo sociológico clásico planteado al respecto, es la evaluación que se hace de la influencia en el desarrollo económico de los países del primer mundo, que en su gran mayoría provienen de culturas religiosas protestantes, versus, el desarrollo económico inferior de países llamados del tercer mundo, en los cuales encontramos, en su base moral, ideas provenientes de la cultura catolica.

(2) Articulo extraído de la Estrella de Arica, 06 – 03 – 07

Investigadora de la UTA, Liza Lagos Araya, desarrolla novedoso enfoque.
"Las pruebas que se han usado a nivel de salud mental no calzan. Uno no puede calzar a un niño con un manual, pero un niño no puede quedar fuera del sistema por ser de una etnia". Así concluye la sicóloga del Instituto de Alta Investigación de la Universidad de Tarapacá, Liza Lagos Araya, el primer horizonte de un completo estudio multidisciplinario sobre la etnia aymara.
A partir del doctorado en Genética Humana y Biología Molecular, dictado por la Universidad Autónoma de Madrid y con la asesoría del Premio Nacional en Ciencias, Francisco Rothhammer, la sicóloga temuquense, radicada en Arica, estudia a un grupo de 200 niños y jóvenes aymaras, del Liceo C-3 de Putre y el Liceo Agrícola Abelardo Núñez, en el contexto del sistema educacional occidentalizado.
A través de diferentes pruebas de distintas disciplinas, el material sicológico aplicado arrojó más de alguna sorpresa. Los manuales de diagnostico para el Síndrome de Déficit Atencional, sin o con hiperkinesia, incorpora criterios que se supone calzan de manera universal.
Sin embargo, en las conclusiones preliminares de la primera parte de la investigación, arroja reflexiones como que los niños y jóvenes aymaras poseen a nivel emocional un discurso y movilización característica "ni mejor ni peor, pero muy diferente a lo que tenemos en el sistema occidentalizado".
Es por eso que a partir de esos primeros atisbos, se advierte que si bien la sicología y la siquiatría utilizan manuales diagnósticos donde se considera la caracterización de fenómenos visibles (síntomas) que constituyen ciertas enfermedades o fallas, no hay estudios para resolver si existen o no diferencias asociadas a variables socioculturales.
A juicio de la sicóloga, la falencia estaría en el sistema, en el cual ya existen los métodos para tipificar una enfermedad, pero siempre desde una perspectiva occidentalizada.
En la titánica investigación que considera una numerosa muestra y la aplicación de manuales diagnósticos, han colaborado desinteresadamente académicos y alumnos de distintos niveles de la carrera de Sicología de la UTA.


HIPOXIA
La primera parte de la investigación doctoral, ha incorporado estudios paralelos, como las condiciones medioambientales, en los cuales vive la etnia aymara.
Para eso, durante el 2006, se realizó un experimentó con ratas de laboratorio, trasladadas desde Santiago. Con un grupo control en Arica, y con otro grupo de roedores en el altiplano.
Las ratas con hipoxia (falta de oxígeno) crónica presentan respecto del grupo control diferencias en los niveles de aprendizaje.

viernes, 16 de noviembre de 2007

Infidelidad.



Es bastante interesante indagar en temas como estos como la infidelidad, el engaño emocional u otros parecidos, ya que es un tema bastante recurrente en nuestra sociedad actual. Incluso ahora nos podemos dar cuenta de los rápidos cambios en nuestra juventud con nuevos términos como “ponsiar” que es el hecho de besar a mas de una persona; comúnmente para ganarse este especie de titulo se debe conseguir como mínimo 3 relaciones que comúnmente se da en fiestas.


En la que respecta a la infidelidad dentro de una relación de pareja, al investigar sobre el tema me llamo mucho la atención un libro llamado “Anatomía de una vida secreta” del psiquiatra norteamericano Gail Saltz en donde se tratan distintos tipos de vidas secretas en donde se analizan y tratan, en el mismo aparece una historia de una mujer, ya casada hace 12 años y con dos hijos, su marido ya no le preguntaba sobre su trabajo, preocupaciones o necesidades. No se sentía atractiva para él y rara vez pasaban tiempo solos. En este contexto apareció un colega . Juntos discutían temas de trabajo. Primero en la oficina, luego en el café y también en el restaurante. Con el tiempo se paso del plano laboral al personal, comenzando con mensajes de texto y los e-mails. Pronto esta mujer tuvo que reconocer que se había enamorado de su colega y amigo.


“No se sentía así de “viva” desde hacía mucho tiempo, estaba aliviada de tener al fin después de tanto tiempo alguien con quien con quien hablar, a quien contarle los secretos mas profundos de su corazón sin temor a ser criticada …”


A la misma vez , esta mujer se decía así misma que no había nada de malo con esta nueva relación, porque ni siquiera había habido un beso de por medio.
Su marido empezó a notar que su mujer llegaba más tarde a la casa. Hablaba por celular largo rato los fines de semana y cuando le preguntaba con quién, respondía con evasivas. En esta momento el debió reconocer que había estado muy ausente de la vida de su mujer, por razones de trabajo, estrés y mal humor. Y también reparó el grave deterioro que había sufrido su vida sexual el ultimo año.


Cuando esta mujer recurrió al psiquiatra, ella mostró se mostró absolutamente deprimida: si bien no había consumido la infidelidad, estaba enamorada de un hombre que la hacía sentir bonita, divertida y valiosa y se sentía incapaz de dejar de verlo.


El psiquiatra Gail Saltz escribe: “la infidelidad emocional, por mucho que no incluya las relaciones sexuales, involucra secreto, decepción y por lo tanto traición. La gente que se involucra en este tipo de relaciones no consumadas preserva su imagen de intachable, convenciéndose que no hace nada malo. Ahí está el error. Porque la pérdida de confianza es un aspecto doloroso presente en toda infidelidad y tal vez, al más difícil de superar”.


Este psiquiatra asegura que poca gente anda en busca de una ventura. Pero al igual que el caso citado anteriormente, hay momentos en la vida matrimonial o de pareja en que alguno de los dos, o ambos, se sienten aislados y frustrados. En vez de hacer un esfuerzo para mejorar la relación, las mujeres en particular asumen que la situación no tiene vuelta atrás, se cansan de dar la pelea. Así, aunque no están conscientemente “en el mercado”, son blanco seguro: hambrientas de atención, emoción y de alguien que llene el vacío que sienten por dentro.
El concreto el dr. Saltz afirma “aunque las aventuras emocionales han existido siempre, estoy viviendo cada vez más casos en mi consulta. Será porque el e-mail, Messenger y teléfonos celulares dan privacidad única que permite estar en contacto sin tocarse siquiera”.


¿Como protegernos de terceros?


El doctor es bastante claro al darnos estos puntos:
- Una relación de amistad sana entre hombre y mujer no es clandestina.
- Siempre que un hombre y una mujer evitan contarle a sus cónyuges cuánto tiempo pasan con un colega, se arreglan cada vez mas que van a salir juntos. O confían mas en ellos que en sus esposos, están envueltos en una aventura.


A partir de este reconocimiento, llega el momento de mirar el matrimonio mas de cerca.
¿Qué le falta al marido o mujer, que ella o él necesite?
La mejor receta es preguntarlo y contestarlo directamente, porque cuando no pueden expresar sus sentimientos, preocupaciones y sueños, ambos están en peligro de una traición. Las personas que se encuentran en esta situación no deben reclamar más cercanía sino que deben cuidar su relación de terceros.


De la misma manera podemos protegernos evitando hábitos como coquetear con otros, pasar tiempo “inocente” con un ex y rodearse o salir con otros infieles que hacen parecer que lo que hacen no es nada grave.


Mucha gente no aprecia su relación matrimonial hasta que esta a punto de perderla. Es por esto que toda relación requiere invertir tiempo, esfuerzo y energía emocional. Esto es algo que cualquier adulto casado sabe o intuye muy bien. Pero aun así en vez de aquellos e-mails, mensajes de textos no fueran con algún tercero, sino que con la misma pareja talvez todo esto cambiaria y se lograría evitar todas aquellas decepciones, penas, odio y otros sentimientos y problemas que todo esto lleva consigo mismo. No podemos olvidar que muchos de estos matrimonios tienen hijos, los cuales se transforman en un peso psicológico para los padres. Cuando la relación se vuelve insostenible para los padres, la mejor opción es la separación pero por miedo a provocar daños a sus hijos, estas malas relaciones continúan, llegando a maltratos físicos y mentales lo cual es muchísimo más grave para los hijos.



Por ultimo les dejo un video de unos doctores argentinos en donde en breves palabras hablan de la infidelidad, es un video muy corto pero bastante interesante.


http://www.youtube.com/watch?v=gHQoSGrfKbk

jueves, 15 de noviembre de 2007

La formacion y consolidacion de una pareja


Una relación de pareja:

Cuando un hombre y una mujer se conocen y desean formar una pareja, es inevitable que pasen por la etapa del “No conocimiento”, la comúnmente denominada enamoramiento, la cual consiste en ver a la otra persona como un ser casi perfecto, sin embargo este proceso a lo único que conlleva es a idealizar cada vez más a una persona, por supuesto dejándose llevar por los ideales propios, cegándonos de la realidad.

Una vez que esta etapa esta superada, comienzan a aparecer las dos personas desde un “Yo”, es decir, individuales, surgiendo así los deseos y anhelos de cada uno, las necesidades, los valores, y proyectos, pero siempre marcados por la esencia de cada cual; Todo esto provocando diferencias y discusiones, las cuales se podrían evitar si todos comenzáramos de la aceptación del otro como es, con sus defectos y virtudes, no como uno quisiera que fuese, de lo que cada uno desea, anhela, espera y/o necesita de su pareja, de lo que cada uno desea para sí mismo como persona independiente en otras áreas y la necesidad de aceptación y respeto por parte de su pareja; Para esto también es necesario dejar en claro a lo que se esta dispuesto a transar o renunciar, lo que es negociable y lo que no, para cada uno. Todos estos contratos de palabra, requieren de acuerdos mutuos, de negociaciones, renuncias y de ganancias (yo renuncio a algo, al igual que tu, para que los dos ganemos algo, en beneficio de nuestra relación);

Por supuesto una relación de pareja nunca es estática, lo cual requiere de constantes acuerdos y negociaciones, tanto implícitas como explícitas, sin duda esto es un gran trabajo para la pareja, pero si están bien concensuados no tendría porque ser una gran dificultad.